La idea surge a raíz de una necesidad propia, almacenar más de 400 claves, propias y de clientes. Empieza a desarrollar como un proyecto propio y se da cuenta de que creando un sistema de subscripciones se podría extrapolar a cualquier empresa que necesite almacenar claves, es decir, todas.
Busca solucionar el problema de la gestión de claves. La mayoría de empresas las guardan en un documento, o directamente en un cuaderno. Con esta herramienta busca que el proceso de almacenaje de claves en una empresa sea seguro, dotándola de una potente herramienta con la que solo necesitas memorizar una clave para acceder a todas, evitando el clásico problemas de poner a todas las cuentas la misma clave o directamente establecer claves que no cumplen con los patrones mínimos de seguridad o la nueva normativa sobre protección de datos, evitando las correspondientes sanciones económicas.
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