Scoobic Urban Mobility espera estrenar a finales de este año su nueva fábrica de vehículos eléctricos para el reparto de última milla. A través de esta buscan apostar al desarrollo nacional tanto para sus vehículos como para sus baterías. Actualmente, la empresa sevillana realiza estos desarrollos en China, donde cuenta como socio industrial al grupo chino RAP.
“El objetivo es alcanzar mil puestos de empleos y mil millones de euros de facturación para el año 2025”, subraya Gómez haciendo alusión a su proyecto “Mil al cuadrado”.
Para financiar este proyecto cuentan con la inversión de InnoEnergy, apoyada por el Instituto Europeo de Innovación y Tecnología.
Sin embargo, esta no es la única fábrica que planean instalar, según detalla Gómez, Scoobic apuesta por un proceso de expansión hacia Latinoamérica.
Los países a los que apuntan son tres, Brasil, México y Colombia, colocando al primero de estos como su próximo paso para su ingreso al mercado latinoamericano.
La empresa también tiene un acuerdo con Bridgestone para vender y prestar el servicio postventa de sus coches eléctricos a nivel global.
Sobre el modelo de negocio de Scoobic, actualmente esta ofrece en alquiler sus vehículos para la logística de última milla a diferentes empresas con una propuesta de valor que ellos denominaron «Movilidad, Energía y Datos» (MED).
“Nosotros cobramos por kilómetro recorrido y dependiendo del modelo del vehículo que se use”, resalta.
Para ello, la start-up cuenta con diferentes diseños, desde patinetes hasta pequeños camiones, los cuales permiten realizar un reparto de manera eficiente. Además, por ser cero emisiones pueden ingresar a todas las zonas de las ciudades sin problema.
Sobre el tema de la infraestructura de carga, la empresa trabaja en todos sus vehículos con baterías extraíbles de 10 kilogramos, las cuales pueden ser intercambiables en el momento.
“Acabas con el problema de la autonomía y con el tiempo de recarga”, remarca el CEO sobre la innovación empleada.
